El análisis táctico del rival es una capacidad fundamental en el entrenador de fútbol para que este construya su microciclo de entrenamiento y modelo de juego acertados
JUSTIFICACIÓN
No descubriremos nada a nadie, si decimos que los avances tecnológicos y científicos han provocado cambios en casi todos los ámbitos del día a día en el siglo XXI. En el fútbol, a estas cantidades de mejoras producidas por ciencias y tecnologías, hay que añadir la mejoría a nivel de estudio y de conocimiento del propio juego con el paso de los años. Y en este artículo intentaremos abordar una de las muchas partes del “todo” del que se tienen que encargar los cuerpos técnicos durante sus microciclos de trabajo, que se ha visto afectada por todas las mejorías de las que unas líneas arriba hemos hablado. No es otra que el análisis del equipo rival.
Mucho se habla de la incertidumbre que rodea al juego del fútbol, en el que cualquier movimiento de los 11 jugadores de uno de los dos equipos puede variar el funcionamiento del resto de los jugadores, y eso hace que se multiplique la complejidad y aumente la dificultad de creer que los que estamos fuera (me refiero a los diferentes entrenadores) podemos controlar algo de lo que ocurra dentro del rectángulo de juego.
Hay una frase propia de la psicología, que creo que puede ser utilizada para cualquier área de la vida, y como no, también al fútbol. “Controlar lo controlable”. Aplicándola en nuestro deporte, y siendo más concreto, llevándola al punto de vista de los cuerpos técnicos, podemos interpretar la frase como intentar hacer todo lo posible para disminuir el nivel de incertidumbre que vayan a encontrarse nuestros jugadores a la hora de jugar un partido. Siendo más claros aun, los entrenadores tenemos que hacer que los jugadores tengan las menores dudas posibles dentro del partido, y debemos de encargarnos de facilitarles toda aquella información que le vaya a ayudar a la hora de enfrentarse al rival.
Antes de ir al grano y de centrarnos en lo importante, hay dos cosas que deben de quedar claras:
- El comportamiento del rival influye en un partido. Hay entrenadores que creen mucho en trabajar en mejorar al equipo (algo que obviamente compartimos y vemos primordial), y opinan que es una pérdida de tiempo mirar al rival. Pero por poner un ejemplo, si un rival nos espera en repliegue, el escenario de ese partido sería muy diferente a si nos presionan alto, por lo tanto, conocer esa situación nos ayudará en el transcurso del partido.
- Con el análisis del rival, podemos detectar comportamientos tácticos tanto cuando tengan el balón como cuando estén en proceso de recuperarlo, así como aspectos individuales que nos pueden acercar a facilitarles el escenario a nuestros jugadores.
INTRODUCCIÓN
Para empezar, el proceso que debemos de seguir si queremos ayudarnos en la preparación de un partido del análisis del rival, es el siguiente:
- El primer paso de todo cuerpo técnico, debe de ser el de dotar de una identidad y de un modelo e idea de juego propia al equipo. Una vez que los jugadores interioricen esas ideas (quizás esto sea lo más difícil del fútbol), el equipo dispondrá de una serie de comportamientos que dominen y utilicen durante los partidos, que los acercará a competir bajo un mayor rendimiento, es decir, unos puntos fuertes. Así como también tendrá aspectos del juego en los que tienen más dificultades, puntos débiles.
- El siguiente paso será el propio conocimiento del cuerpo técnico de los puntos fuertes y débiles de su equipo, y trabajar en base a eso durante los entrenamientos de la semana. Potenciar los puntos fuertes + minimizar los puntos débiles.
- Y aquí es donde entra el análisis del rival, ya que los comportamientos que tengan, pueden favorecer a nuestro modelo de juego para aumentar el rendimiento de nuestro equipo, o al contrario, su modelo de juego puede ser el más adecuado para exponer nuestras debilidades.
DESARROLLO
Dentro del análisis del equipo rival, vamos a diferenciar entre:
- Análisis previo: el que realizamos antes del partido, con visionado de partidos anteriores.
- Análisis durante el partido: el que tiene lugar sobre la marcha del desarrollo del juego.
- Análisis postpartido: con el vídeo del propio partido.
ANÁLISIS PREVIO
Cuando visionemos un partido del equipo rival, debemos de centrarnos en detectar cuales son las formas de actuar que tienen en los diferentes momentos del juego, así como el sistema que emplean, los comportamientos individuales que se repiten y los cambios que se producen en todo lo nombrado anteriormente en base al resultado. Pasemos a desgranarlo brevemente:
- Defensa organizada: intentaremos centrarnos en el posicionamiento del equipo cuando no tienen el balón, para saber donde pueden encontrarse los espacios que nos permitan atacar, así como el comportamiento de sus jugadores.
- Ataque organizado: los puntos clave dentro de su ataque podrían ser, como inician el juego, como se comportan una vez que se encuentran en ataque posicional y como se producen sus llegadas.
- Transición ataque-defensa: en esta fase observaremos que es lo que hacen los jugadores rivales una vez que pierden el balón.
- Transición defensa-ataque: buscaremos comprender que es lo que buscan una vez que recuperan la posesión del balón.
- Acciones a balón parado: analizaremos la disposición de los jugadores, tanto en las acciones defensivas como ofensivas.
- Comportamientos individuales: se trata de la búsqueda de automatismos o acciones que repitan los jugadores de forma individual. Por ejemplo, si un delantero suele buscar desmarques de apoyo o de ruptura.
- Sistema de juego: la disposición o el reparto en el espacio de los jugadores cuando tienen el balón y cuando no tienen el balón. Por ejemplo un equipo que en ataque posicional se encuentre en 4-3-3 y en defensa organizada en 4-5-1.
- Dinámica en base a resultado: por ejemplo, si se producen cambios en el modelo o sistema si el equipo va por arriba en el marcador en los minutos finales.
ANÁLISIS DURANTE EL PARTIDO
Una vez que hayamos realizado el análisis previo del equipo rival, tendremos una idea del escenario que se nos puede presentar durante el transcurso del partido. A partir de ahí, entrarán la agudeza de los entrenadores y cuerpo técnico de buscar imponer sus puntos fuertes y esconder sus debilidades, sabiendo los comportamientos que pueden encontrarse, así como de intentar minimizar la aparición de los puntos fuertes del rival y atacar sus débiles. Es decir, se creará un plan de partido.Un ejemplo puede ser, que si el equipo rival cuenta con mejor salida de balón en el inicio por el lado izquierdo, orientar la presión de forma que el equipo rival tenga que iniciar por su lado derecho. Y es que un partido al fin y al cabo, es una batalla táctica entre dos equipos, en las que cada uno intenta imponer sus armas para acercarse a la victoria.El análisis durante el transcurso del partido, será limitarse a observar si el plan de partido que se ha preparado sigue el guión establecido, partiendo con la ventaja de conocer ciertos comportamientos rivales por el anterior análisis.
ANÁLISIS POST-PARTIDO
Al finalizar el partido, conociendo como ha transcurrido, podemos realizar el último análisis del rival. Esto es algo menos habitual, ya que salvo en el fútbol profesional, es difícil que un miembro del cuerpo técnico se centre solamente en el rival, y el estudio post-partido suele realizarse sobre nuestro propio equipo.En este último análisis, nos centraremos en lo que ha hecho el rival para intentar atacarnos y defenderse de nuestros ataques, sacando las conclusiones oportunas sobre si han tenido éxito o no, para poder mejorar esas situaciones si es necesario. Así como también buscaremos ver si el plan de partido que habíamos preparado ha tenido resultado en nuestra búsqueda de aumentar el rendimiento del equipo ante ese rival.
CONCLUSIÓN
Podremos debatir sobre si el análisis del rival puede tener influencia en el resultado final de un partido o no. Pero de lo que si estamos seguros, es que si el objetivo de un cuerpo técnico es facilitar y dotar de herramientas necesarias a nuestros jugadores para el desarrollo de un partido, y así mejorar su rendimiento, el análisis del rival nos acerca a ello.
Si un jugador conoce el modelo de juego del rival, la forma en la que atacan, defienden, transitan, incluso los comportamientos del par al que se va a enfrentar durante el partido, estamos ganando tiempo para imaginarse situaciones del partido, y preparándolo para que las respuestas a las acciones del equipo rival, sean más acertadas.
El análisis del rival nos permite anticipar situaciones de juego que nos podemos encontrar durante el partido, y preparar a los jugadores para ello.